01 julio, 2016

Viva La Pepa

VIVA LA PEPA

Contra lo que pudiese creerse, "viva la Pepa" no es el grito de alegría de un buscador de oro, sino el que usaban los liberales españoles en adhesión a la Constitución de Cádiz, promulgada el 19 de marzo de 1812, en la festividad de San José Obrero.
Como a los José se los apoda Pepe, en vez de decir "viva la Constitución" - lo que conllevaba llegar a ser reprimidos - los liberales gritaban "viva la Pepa". 
Hoy, en Argentina, su significado se ha desvirtuado y más bien se parece a "piedra libre" o "vale todo".

03 junio, 2016

Atorrantes


ATORRANTES

 

Lo de "atorrantes" viene de cuando a principios del siglo pasado depositaron unos grandes caños de desagüe en la costanera del Río de la Plata, frente a la Casa de Gobierno, en lo que hoy es Puerto Madero.
Estos caños tenían la leyenda "A. Torrant et Cie." (nombre del fabricante) escrito en letras grandes a lo largo de cada segmento de caño.
Estos caños estuvieron más de un año depositados en el lugar antes que por fin los enterraron.
Durante ese tiempo, muchos desvalidos, vagos, linyeras y sujetos de avería que rondaban por la zona los utilizaron para esconderse, dormir y hasta vivir en ellos. Surgió así el "se fue a vivir a los caños", que con el tiempo evolucionó hasta quedar en "se fue a los caños".
Y a los que hicieron de los caños un hogar se los llamó "atorrantes" y por extensión se utiliza para referirse a toda persona pendenciera, de mal comportamiento, etc.

14 mayo, 2016

Agarrate Catalina !



Catalina pertenecía a una familia de trapecistas que trabajaban en un circo recorriendo los barrios porteños en los años cuarenta.
Su bisabuela, su abuela y su madre habían muerto durante diversas actuaciones circenses.
La gente, que conocía su historia, a modo de cábala y antes de cada función le decía "¡Agarrate bien, Catalina!”.
Con el correr del tiempo la frase se fue deformando hasta llegar al conocido "Agarrate, Catalina”.

Antes de cada actuación, alguien del circo gritaba "Agarrate Catalina".
Hasta que una vez la persona que debía pronunciar la frase no estaba presente.
Así fue como la pobre Catalina terminó muriendo a los 25 años durante una función del circo en el barrio de San Telmo.
Se emplea para avisar que se debe estar alerta, ante una situación que no pinta fácil.

10 marzo, 2016

El delito.




El delito no se controla con represión dura, con garrotes , o con muerte.
El delito es un emergente de una sociedad que se encuentra alterada.
El hombre no es malo por naturaleza, ni esta biológicamente programado para
agredir, robar o matar.
En su esencia natural, prioriza su subsistencia, y por medio de su inteligencia, busca las formas e instituciones que le permitan convivir armónicamente , sin diferencias degradantes con los demás.
Obviamente la realidad nos muestra ese otro contexto de que hablábamos, una
sociedad que margina , una sociedad con alarmante diferencias sociales , de
educación , y de acceso al conocimiento.
Mientras un sector se permite el lujo de investigar desde el origen mismo de
nuestro ser, hasta el origen y destino del universo todo, otro sector, encuentra como único lujo el subsistir, el recibir una ración diario de alimento.
Y allí germina el delito, y fundamentalmente en nuestras comunidades
del subdesarrollo, el delito llamado"social", aquel que delinque para
subsistir, o porque no fue preparado para priorizar principios , que generalmente vulnera, para pasar a formar o a conformar la subcultura delincuente.


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Rodolfo

03 diciembre, 2015

La leyenda de la yerba mate

Se dice que antes de que Yací bajara, los hombres estaban tan ocupados en sus propios quehaceres que apenas se miraban o conversaban un poco. Yací era inmensa, refulgente, poderosa. Era magia y luz. Porque Yací era la luna, y plantada sobre el firmamento, alumbraba cada noche las copas de los árboles y los caminos, pintaba de color plata el curso de los ríos y revelaba los sonidos, que sigilosos y aterrorizantes, se escondían en la penumbra de la selva. Una mañana Yací bajó a la tierra, acompañada por la nube Araí. Convertidas en muchachas, caminaron por los senderos apartados de la aldea, entre el laberinto de sauces, lapachos, cedros y palmeras. Y entonces, de improviso, se presentó un yaguareté. Con mirada tranquila y desafiante. El paso lento y decidido. Las zarpas listas para ser clavadas y las fauces dispuestas a atacar. Pero una flecha atravesó como la luz el corazón de la bestia. Yací y Araí no acababan de entender lo sucedido cuando vieron a un viejo cazador que desde el otro extremo de la selva las saludaba con un gesto amistoso. El hombre dio media vuelta y se retiró en silencio. Aquella noche, mientras dormía en su hamaca bajo la luz de la luna, el viejo cazador tuvo un sueño revelador. Volvió a ver el yaguareté agazapado y la fragilidad de las dos jóvenes que había salvado aquella tarde, aunque esta vez le hablaron: ─Somos Yací y Araí, y queremos recompensarte por lo que has hecho. Mañana cuando despiertes encontrarás en la puerta de tu casa una planta nueva. Su nombre es Caá, y tiene la propiedad de acercar los corazones de los hombres. Para ello, debes tostar y moler sus hojas. Prepara una infusión y compártela con tu gente: es el premio por la amistad que demostraste esta tarde a dos desconocidas. En efecto, a la mañana siguiente el hombre halló la planta y siguió las instrucciones que en sueños se le habían dado. Colocó la infusión en una calabaza hueca y con una caña fina probó la bebida. Y la compartió. Aquel día los hombres, entre mate y mate, conocieron las horas compartidas y nunca más quisieron volver a estar solos.
Tomado de facebook

08 noviembre, 2015

En Pampa y la vía

Foto de Amargo Obrero.


Gentileza de Facebook

05 noviembre, 2015